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Nick Oliveri es un músico muy versátil; ha formado parte de varias bandas, de estilos diferentes, a lo largo de casi dos décadas de carrera.



Comenzó su carrera nada menos que como bajista de Kyuss, banda seminal del denominado stoner rock de la que fue miembro fundador. Más tarde sería militaría en bandas como Dwarves o Queens of the Stone Age, banda con la que antiguos miembros de Kyuss consiguieron el éxito que se les venía negando. Paralelamente a esta banda, Oliveri se embarcó en un proyecto propio llamado Mondo Generator en el cual ejerce de cantante y guitarrista y da rienda suelta a su faceta más cafre y punk. En las composiciones de esta banda alterna la guitarra eléctrica y la acústica, dando esta última opción lugar a canciones interpretadas por él solo.



La evolución última de esto ha sido sacar un disco acústico en solitario titulado Death Acoustic, un título sospechosamente parecido al del último disco de Metallica. En él incluye nuevos temas en la línea de lo que venía haciendo con Mondo Generator, e incluye dos versiones de temas de sus anteriores bandas: Love has passed me by, de Kyuss, Dairy queen de los Dwarves, Unless I can kill de Mondo Generator, U blow de Moistboyz y I'm gonna leave you, de Queens of the Stone Age. El repertorio de versiones se completa con Start a fight, de Raw Power, que abre el álbum, Hybrid moments, de los Misfits, y cierra el disco Outlaw Scumfuc, del malogrado G.G. Allin. Dos composiciones propias para la ocasión, Invisible like the sky y Follow me completan media hora intensa del mejor Oliveri.

La consiguiente gira le ha llevado a visitar La Sala Boite de Madrid el pasado jueves 5 de noviembre aunque en principio estaba previsto que el concierto fuera en Moby Dick.



Los teloneros fueron una banda conocida en el ambiente de rock madrileño, El Páramo, grupo totalmente instrumental que camina entre el stoner y el post-rock, con composiciones que combinan ambientes densos con frenéticos cambios de ritmo. Una pena que el local no estuviera preparado para tal derroche de decibelios, por lo que sonaron un poco distorsionados.



Desde el momento en que se subió al escenario Oliveri pidió a la gente que se acercara más al escenario, pero antes del tercer tema, al ver que nadie se movía, fue él mismo el que se bajó del escenario y tocó el resto del concierto entre el público, hablando con la gente entre canción y canción, pidiendo tabaco y fuego, incluso bromeando con los teloneros, ofreciéndose como cantante tras ver que no tenían.




De su repertorio grabado originalmente en acústico sólo tocó I want you to die. También toco las versiones que tiene de sus anteriores bandas mencionadas arriba, así como la versión acústica de Autopilot, canción dedicada a su mejor amigo fallecido, incluida originalmente en el LP Rated R de Queens of Stone Age y cuya versión acústica se puede encontrar en el EP Demolition Day.



El repertorio de versiones de QOTSA se completaría con Millionaire, Six shooter y Quick and to the pointless; los temas de Mondo Generator fueron So High So low, Bloody Hammer y Four Corners, canción esta última cantanda a dúo con su novia, la cual hacía la voz que Mark Lanegan canta en la versión original. Uno de los momentos álgidos fue la interpretación del clásico tema de Kyuss Green machine, que fue coreada por todos los asistentes. Las versiones se completaron con canciones de otras bandas ajenas a Oliveri: Back at Dungaree High, de los noruegos Turbonegro; Endless Vacation de los Ramones; y Can't put your arms round a memory de Johnny Thunders y sus Heartbreakers, dejando claro (por si hiciera falta) que Oliveri realmente disfruta con el Punk con mayúsculas.



(Fotos: capulla.com)